Notas editoriales

La industria se enfrenta a un reto fundamental: encontrar formas de reducir el consumo de agua y energía sin comprometer la eficiencia de sus procesos.

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Las tecnologías de pretratamiento de metales se están reinventando para ello. Una de las más significativas es la plaforización, una tecnología desarrollada por la firma italiana Chemtec, que no solo optimiza el pretratamiento de metales para la pintura, sino que también contribuye al cuidado del medio ambiente al eliminar por completo la utilización de agua.

Durante una entrevista en sus instalaciones en Milán, el CEO de Chemtec, Carlo Guidetti, compartió detalles sobre su tecnología insignia y sobre cómo sus productos apuestan a una transformación tanto de la industria como del impacto ambiental de los procesos de pintura.

Vea la entrevista con Carlo Guidetti

Guidetti explicó que la demanda de procesos industriales más sustentables está creciendo rápidamente, evolución a la que ellos están dando puntual seguimiento. “Cuando fundamos Chemtec, la idea era simple: crear una solución que redujera el impacto ambiental del tratamiento de metales sin comprometer la calidad”.

La tecnología de plaforización de Chemtec refleja este enfoque. Este proceso permite preparar superficies metálicas para la pintura en una sola etapa fría, sin utilizar agua y evitando la creación de lodos, los cuales son adversos al medio ambiente.

“La plaforización no solo reduce el consumo de agua y energía, también asegura una excelente adherencia para las pinturas y una alta resistencia a la corrosión,” destacó Guidetti. Esta tecnología es versátil y puede aplicarse a varios tipos de metales, como hierro, aluminio y acero galvanizado.

Además, es fácil de operar y requiere un mantenimiento mínimo, lo que resulta en una mayor eficiencia industrial. “Es fácil de usar, no necesita análisis continuos ni cambios frecuentes de producto,” agregó Guidetti.

Reemplazo de métodos tradicionales

Históricamente, el pretratamiento de metales en la industria ha dependido de la fosfatación, un proceso que tiene importantes desventajas ambientales.

Los tratamientos con fosfatos, como el fosfato de hierro o zinc, consumen grandes cantidades de agua y generan lodos tóxicos que deben ser tratados.

Además, requieren el uso de productos químicos peligrosos, lo que implica riesgos tanto para los trabajadores como para el medio ambiente.

“La fosfatación ha sido el estándar en la industria durante décadas, pero sus limitaciones son evidentes. El alto consumo de agua y los residuos peligrosos ya no son sostenibles en el contexto actual,” señaló Guidetti.

En contraste, la plaforización se muestra como una alternativa ecológica, al reducir drásticamente el consumo de recursos naturales y eliminar por completo la generación de lodos. “Hemos llegado a un punto donde la industria no puede permitirse ignorar su huella ambiental”.

Otra apuesta de Chemtec es su enfoque en la medición de la resistencia a la corrosión. Tradicionalmente, la industria ha dependido de pruebas de cámara salina, que pueden tardar entre 500 y 1,000 horas en ofrecer resultados y no siempre brindan un diagnóstico claro sobre los problemas.

La alternativa es la implementación de métodos electroquímicos, como las pruebas de corrosión acelerada ACET (Accelerated Cyclic Electrochemical Technique), que ofrece resultados precisos en solo 24 horas y se realizan acorde a los estándares de la ISO 17463.

“Con estas pruebas podemos identificar inmediatamente si hay un problema de corrosión y cuál es su causa. Es un enfoque científico, no subjetivo como las pruebas tradicionales,” aseguró Guidetti. Esto no solo acelera el proceso de prueba, sino que también permite a las empresas actuar rápidamente para resolver cualquier problema, garantizando así un mayor control sobre la calidad de sus productos.

Tratamiento de agua

Un desafío adicional en los procesos de pintura es la gestión del agua en las cabinas de pintura, para lo cual la firma liderada por Guidetti ha desarrollado un sistema de purificación que permite reciclar el agua durante largos periodos, y reducir de manera significativa los costos y el impacto ambiental.

El sistema combina coagulantes y floculantes especiales con un equipo de filtración compacto, lo que facilita la extracción de residuos de pintura del agua.

“Nuestros clientes que antes cambiaban el agua cada mes, ahora pueden hacerlo cada dos años gracias a nuestro sistema,” aseveró Guidetti. Esto representa un ahorro considerable para las empresas, tanto en términos económicos como medioambientales. “Con una inversión baja, las empresas pueden purificar y reutilizar el agua continuamente por meses o incluso años,” añadió.

Desde su fundación en 2010, el fabricante italiano ha instalado procesos de plaforizacón en diversas industrias, desde la automotriz hasta la de electrodomésticos. Empresas como Bosch y General Electric han adoptado sus soluciones .

“Trabajamos con industrias medianas y grandes, y las experiencias de nuestros clientes hablan por sí mismas”.

A pesar de los desafíos económicos actuales en Europa, Chemtec sigue creciendo. En palabras de su fundador: “La palabra ‘crisis’ en griego antiguo significa ‘oportunidad’ y ‘cambio’. Para nosotros, la situación económica actual es una oportunidad para que las empresas adopten nuevas tecnologías que beneficien tanto a su economía como al medio ambiente.”

De cara al futuro, Guidetti cree que la innovación seguirá siendo clave para el éxito de la empresa. “Las industrias a menudo son reacias a adoptar nuevas tecnologías porque están acostumbradas a hacer las cosas de una manera determinada. Pero el cambio es necesario para el progreso".